“Yo soy Virginia Berasategui y he cometido
un error”. Así declaraba Vir su dopaje con rEPO en el
Triatlón de Bilbao, en una rueda de prensa sin preguntas, acompañada de su
padre, el primer triatleta español en ser finisher en el IM de Hawaii de 1988,
Javier Berasategui, “el Berasa”. Vir entra en la sala envuelta en lágrimas, se
sienta y comienza a leer un papel escrito. Al principio se le nota
descompuesta, no le llegan las palabras, pero se empieza a entonar, las
lágrimas desaparecen y crece su orgullo triatlético “Soy Virginia Berasategui y estoy aquí para
dar la cara”, desapareciendo la humildad inicial. Pero llega un
momento en que se derrumba, las lágrimas no le dejan hablar seguido, palabras
entrecortadas “he decidido
afrontar la verdad…he cometido un error gravísimo”. La verdad
duele, y mucho. Está acostumbrada a lidiar con las excusas, pero no con la
realidad, su vida triatlética ha sido un cuento de hadas del que no quiere
salir. Pero lo hace “Soy
Virginia Berasategui y quiero pedir perdón a toda la gente que he defraudado…me
entristece acabar mi carrera así”. Enhorabuena Vir, has salido de
esta pesadilla. Hay que ser muy valiente para eso, y tú lo eres. Solo tú sabes
por qué lo has hecho, pero como dice
Lance Armstrong “No sentía que estaba
haciendo trampas. En ese momento no. Busque en el diccionario la definición de
trampa, que era tomar ventaja sobre un enemigo. No lo sentía. Todos jugábamos
igual”.
El pasado 15
de mayo de 2013, se celebraba el triatlón de Bilbao. Vir había declarado a
principio de año su futura retirada del triatlón y partía por méritos propios
como la gran favorita, pero mucho más teniendo en cuenta la especial motivación
con que contaba: despedirse de su afición a lo grande. Este año ha sido frío y
el 15 de mayo en Bilbo la temperatura del agua de la ría no superaba los 14º.
El triatlón se hace duro, 13 evacuados por hipotermia tras la natación además
de los que retiraron durante el resto de la prueba. Virginia gana sobrada, 11
minutos a Asa Lundstrom, profeta en su tierra, lo más bonito. En la rueda de
prensa declara que el
agua estaba ideal (1), que el que no esté preparado que se quede en su
casa. Pero el 15 de junio el sueño se convierte en pesadilla: Virginia
Berasategui positivo en el triatlón de Bilbao. El día 26 de junio la pesadilla
se hace realidad, rEPO, el contraanálisis de la muestra B fuerza esta
confesión.
Ya hemos reconocido que Vir ha sido
valiente, no es fácil reconocer un error y menos en una tierra en la que ya han
apoyado a Igor Astarloza que denunciaba un complot contra él. Todo el pueblo
salió a arroparle, hasta los niños. Ahora sigue corriendo en el mismo equipo.
Pero Vir, a pesar de su valentía, ha hecho trampas y eso plantea dudas: ¿Es
creíble la declaración de alguien que ha hecho trampas? ¿Debemos cuestionar
todo su palmarés? ¿Debemos preguntarnos cuál ha sido su trayectoria? ¿Lo ha
hecho sola o hay alguien más detrás? ¿Debemos perdonarla?
Preguntas
con difícil respuesta. Su declaración no es del todo creíble. Debemos
perdonarla pero no olvidar, debemos valorar su valentía al reconocer un error
pero también hay que reconocer que no nos podemos creer todo lo que cuenta. Por
ejemplo, es difícil creer que haya conseguido la rEPO ella sola, no es fácil,
ni llegar a ella ni usarla, bueno al menos para alguien que no esté
acostumbrado. Es muy probable, por tanto, que alguien la haya ayudado, ya
ahondaremos en ello. Respecto a su palmarés y su trayectoria sería bueno
rebobinar la cinta y volver a estudiarlo, viajemos en el tiempo y vayámonos
a…
(1)la noticia ha sido eliminada del
link, es lo que pasa cuando los medios comen de los deportistas.